Hace
apenas unos días, una amiga de Ecuador visito Perú, era de ley el encuentro, no
recuerdo desde que año atrás empezamos a ser contactos en las redes sociales y
desde que momento en adelante la sentí más como una amiga.
En fin,
el día había llegado, 02 de mayo, día sábado, me levante temprano y termine de
hacer un cartel que le había prometido, (más que todo era en son de broma) se
supone que debíamos llevar ese cartel al aeropuerto, pero como no pude, se lo llevaría
al hotel; después de terminar mi cartel con aire a mural de niño de 3 años,
aliste lo necesario, dinero (sufriente dinero, o eso al menos creía yo) llaves,
identificaciones, espejos, papel higiénico, ah y una pequeña almohada con un Sinsajo,
que daba la idea de ser un cojín original de la película Los Juegos del hambre.
(Según yo)
Después de
tantos preparativos, de correr por aquí y por allá, mientras esperaba a una
amiga más que se había unido al tour, llegue allá a las 9:30am, exactamente a
la hora pactada, eso fue un alivio, nos encontramos en el paradero con una
amiga más, las tres juntas fuimos al hotel, no estaba nada difícil para
ubicarnos, aun así por seguridad me encontré preguntando ¿Dónde está la avenida
Belaunde? A una policía de tránsito.
Entre al
chat pues había visto que nuestra amiga nos había escrito un mensaje, y por ver
mi celular, no me di cuenta el momento en que ella ya nos había reconocido a
nosotras.
Fueron
minutos de suspiros, exclamaciones y Woow, wao, Woow, wao y más así.
El tour empezó
entonces, nuestra primera parada fue el Centro Cívico, donde había una librería,
lamentablemente por estar más entretenidas viendo los libros que había y
armando pataletas por los que no tenían, (No tenían Trono de Cristal ¡VALGAME
DIOS!) olvidamos tomar fotos del lugar.
Después fuimos
a la Casa de la Literatura Peruana, donde después de conocer un poco más de la
historia literaria en el país, y por supuesto esta vez sí hubo muchas fotos. Al
salir decidimos ir a la Feria de Libros, el paraíso de todo lector.
Caminamos
tanto y tanto, y gastamos dinero, que temí que tendríamos que ir cantando en el
bus o lo que sería peor, devolver algunos de nuestros libros ya comprados, pero
resulto que sí, que todavía podíamos seguir dando vueltas por Lima, pero
literalmente teníamos los pies a punto de quebrarse. Estábamos cansadas a más
no poder.
Cuando faltaba
poco para llegar al hotel, empecé a sentirme triste, realmente la había pasado
genial con mi amiga, no podía creer que esto no se volvería a repetir, que ella
se iría y que tal vez ya nunca nos volveríamos a ver, sentí una profunda
tristeza en mi ser.
Pensé en
muchas cosas, en la tristezas de las despedidas y en los fugaces que son los
momentos felices, en como los instantes pasan pero el cariño se queda en tu corazón
como una huella indeleble y que podemos hacer cualquier cosa con eso, desde
construir recuerdos imperecederos hasta hacerlos cuadros de arcoíris en días lluviosos.
Tal vez nunca más la vuelva a ver o tal vez sí, sea lo que sea que dicte el
destino, vivir un día como aquel, es una de las cosas que voy a contar a los
que quieran oír. Todas las cosas que hablamos, todas las fotos que nos tomamos,
las risas, los chistes, los gritos. Es una
de las mejores experiencias que viviré este año.
Todo queda
registrado por siempre en un día de mayo.
P.D. En
el cartel, entre pedazos para armar, estaba esta cómica historia que escribí.
Esa
mañana en Lima, Lena se despertó temprano, pues quería ir a comprar su libro de
50 sombras, Katniss peleaba con Chaol sobre esto, pues ella quería ver a Dorian
actuar como Grey y él no tenía planes de que el príncipe se levantara temprano
aquella mañana después de la noche de strippers que habían tenido los dos. Por
su parte Peeta estaba en su consultorio psiquiátrico, tenía a un Tobías Eaton,
apodado 2x2:4, muy deprimido, porque no
podía soportar la muerte de su disque novia “Emperatriz” o se llama Tris? Va,
no importa, estaba muerta igual.
Afuera
en el prado lejos de toda esta trifulca familiar y mental, una Celaena muy
confiada había retado a un duelo de arquería a un muy vanidoso Kvothe, ambos
habían dado en la liana y ahora discutían a viva voz atrayendo la mirada de
todos, Percy Jackson cansado de sus gritos que no le dejaban dormir, conecto
una manguera a un caño de agua y los empapo a los dos diciendo: “Por el poder
de Poseidón”. En ese mismo momento pasaba un Harry volando en su escoba, que
fue atraído violentamente por el poder del viento que Kvothe había invocado,
muy molesto él saco su varita para lanzarles un hechizo, pero entonces un Jace
con un sentido de “Cuida a los mundanos” muy arraigado, lanzo sus cuchillos
enlazando así, la manga de Potter con todo y varita en la liana. Muchos
aplausos se escucharon, la multitud, lo apabullaba, Katniss se apresuró para
invitarlo a su casa sin ver el cabe en el pie que una pelirroja desconocida le
ponía. Se cayó y sus fechas salieron disparadas.
Por
ultimo un Alex con carteles de “Derriba los Muros” se dejó ver en el prado,
todos voltearon a ver al nuevo desconocido, sin embargo también apareció una
chica con un extraño color de ojos, no. No era color, sus ojos eran diferentes.
– Me llamo Wanda – dijo ella – y tengo boletos para todos, nos vamos a recorrer
Lima – wiii
Todos
rieron y el viaje empezó.
Linda historia amiga, un resumen del gran dia que pasamos junto a Jo :D
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